Jesús González MateosCartas del director Jesús González Mateos

URGE UNA ESTRATEGIA EUROPEA PARA LOS MAYORES

URGE UNA ESTRATEGIA EUROPEA PARA LOS MAYORES

Nuestra Europa, el viejo continente, se ha convertido en un continente de viejos. Se calcula que en 2070 el 30% de la población tendrá 65 años o más, frente al 20,3% de 2019 y que el número de personas que necesitarán cuidados de larga duración, aumentará de 30,8 millones en 2019 a 38,1 millones en 2050. Logremos o no revertir la pirámide de población, bien teniendo más hijos o aceptando la necesidad de una inmigración masiva, legal y ordenada, la realidad de una población mayor creciente es el escenario en que se va a mover nuestra sociedad europea en las próximas décadas. Un fenómeno que, lejos de tener que analizarse como un problema, es un auténtico éxito de nuestro Estado del bienestar. Cada vez más personas en la UE tienen más esperanza de vida y esa longevidad supone un desafío repleto de oportunidades, si sabemos gestionar la sostenibilidad del ecosistema del cuidado a los mayores.

SEGURIDAD EN LA UE: SI QUIERES DEFENSA TE LA PAGAS

SEGURIDAD EN LA UE: SI QUIERES DEFENSA TE LA PAGAS

La prueba más evidente de que el mundo que vivimos ha enloquecido es que el ex presidente de EE.UU. y candidato con muchas opciones de volver a la Casa Blanca, Donald Trump, sugiere que no le importaría que Rusia atacara a sus aliados en la OTAN que no pagan su factura de la organización de defensa. No se puede decir ni alto, ni más claro a los Estados europeos de la UE: si quieres seguridad, te pagas tu defensa. Habrá muchos europeos que duermen complacidos en el sueño de la inocencia, que se pregunten de qué tenemos que defendernos y que preferían vivir de espaldas a una realidad de siglos en los que hemos protagonizado las más terribles guerras de la Humanidad. Sin seguridad la libertad se convierte en un derecho diluido. Por ello, la Unión Europea se ha visto concernida por la boutade del chulo de discoteca yanqui. Caídos del guindo, la cuestión ahora es cómo podemos organizar nuestra propia defensa que cada día es más cara porque requiere de todas las armas tradicionales, incluida, la clase de tropa, y un repertorio de recursos y tecnología avanzados para la batalla de la ciberseguridad.

NORMAS CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA EN TODA LA UE: MÁS VALE TARDE

NORMAS CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA EN TODA LA UE: MÁS VALE TARDE

Por desgracia el fenómeno de la violencia machista es tan antiguo como la propia Humanidad, pero la conciencia de esta horrible lacra social y la legislación puesta en marcha para paliarla tiene varias décadas de aplicación en distintos Estados de la Unión Europea, como España, que tratan de ser vanguardia en la defensa de los derechos de la mujer. La UE, por el contrario, ha necesitado más de seis décadas de existencia como organización política supranacional, para establecer sus primeras normas obligatorias en todos sus miembros para combatir la violencia contra la mujer. En todo caso, más vale tarde que nunca, pues, esta nueva ley aprobada esta semana entre el Consejo y el Parlamento Europeo, pasa a formar parte de la doctrina jurídica común y protegerá a todas las ciudadanas europeas.

EL CAMPO EUROPEO ESTÁ QUE ARDE

EL CAMPO EUROPEO ESTÁ QUE ARDE

Los campos europeos llevan una década de consecuencias del cambio climático. El número de emergencias cuando no de incendios, de inundaciones, se multiplique cada año. Y a ese riesgo natural se añade ahora la airada protesta de los agricultores europeos, que se quejan del deterioro de su forma de vida. Culpan de su situación al incremento de sus costes de producción, combustibles y fertilizantes, fruto de la guerra de Ucrania, a la competencia países terceros que exportan a la UE productos más baratos y, he aquí la paradoja, a la reforma de la PAC que les obliga a fuertes inversiones para hacer sus producciones más sostenibles medioambientalmente. Probablemente los políticos de Bruselas encapsulados en sus dosieres de reformas, se han olvidado que detrás de sus leyes hay gente que se siente abandonada en esta era de cambios radicales. El resultado es que queremos una agricultura y una ganadería más ecológica para salvar el Planeta y, sin embargo, los agricultores se manifiestan bajo el lema: “Nuestro fin, es vuestro hambre”.

DESINFORMACIÓN E INJERENCIA EXTRANJERA EN LA UE: CADA VEZ MÁS ATAQUES

DESINFORMACIÓN E INJERENCIA EXTRANJERA EN LA UE: CADA VEZ MÁS ATAQUES

La manipulación e interferencia de información extranjera (FIMI) contra la Unión Europea se ha incrementado a lo largo de todo el 2023. Según el 2º Informe sobre FIMI realizado por el Servicio de Acción Exterior de la UE, los actores extranjeros han continuado sus intentos intencionales, estratégicos y coordinados de manipular hechos, de confundir y sembrar la división, el miedo y el odio. El ejemplo más obvio es Rusia, que utiliza la desinformación como arma para justificar su guerra de agresión contra Ucrania. Sin embargo, otros actores, como China, también participan de este tipo de acciones. El objetivo de los ataques no es otro que socavar la credibilidad de las instituciones democráticas, y fomentar la división y la polarización dentro en las sociedades de los Estados miembros europeos.

LAS RECOMENDACIONES DEL SEMESTRE ECONÓMICO EUROPEO

LAS RECOMENDACIONES DEL SEMESTRE ECONÓMICO EUROPEO

Aunque la economía de la zona euro ha mostrado resiliencia frente a las importantes perturbaciones económicas de los últimos años, es evidente que ha perdido impulso en los últimos tiempos. Los rumores de recesión en la UE llevan meses llamando a la puerta. Tras la considerable recuperación de 2021 y 2022, se prevé que el crecimiento de la zona del euro se ralentice, hasta situarse en el 0,6 % en 2023. El nivel aún elevado, aunque en curso de moderación, de los precios de consumo de la mayoría de los bienes y servicios ha tenido consecuencias considerables para la economía, a pesar del descenso de los precios de la energía, y la demanda externa no está siendo de mucha ayuda. Al mismo tiempo, el efecto del endurecimiento de la política monetaria se va haciendo patente en la economía, especialmente, en el poder adquisitivo de sus clases medias. De ahí que el Consejo de Ministros de Economía y el Eurogrupo, hayan definido lo que consideran recomendaciones fundamentales a ejecutar por los gobiernos en el primer semestre 2024.

JUEGO DE TRONOS EN BRUSELAS: MICHEL MUEVE FICHA Y LA LÍA

JUEGO DE TRONOS EN BRUSELAS: MICHEL MUEVE FICHA Y LA LÍA

Nadie mejor que él mismo sabe los motivos que han llevado al presidente del Consejo Europeo, el belga Charles Michel, a anunciar con las primeras horas del nuevo año su candidatura a encabezar la lista de los liberales de su país en las elecciones europeas del próximo mes de junio. Será por intereses puramente particulares para colocarse el primero de cara a la batalla de cargos que los comicios propiciarán; será para mover el tablero institucional y forzar a los líderes europeos a buscar su sustituto antes de que votemos o, sencillamente, porque el surrealismo tan proclive a la personalidad de los belgas, le ha inspirado, pero la realidad es que la decisión de Michel la ha liado en el panorama de Bruselas. Su mandato concluía en noviembre de este año, pero ahora la institución se quedará vacante cuando vayamos a las urnas en primavera y con la amenaza de que el “peligro amarillo” de la política europea, el primer ministro húngaro Viktor Orbán, pueda convertirse a la vez en presidente de turno de la UE y del Consejo Europeo.

ELECCIONES EUROPEAS 2024: LA CLAVE SERÁ LA PARTICIPACIÓN

ELECCIONES EUROPEAS 2024: LA CLAVE SERÁ LA PARTICIPACIÓN

Entre el próximo 6 al 9 de junio se celebrarán las elecciones europeas de las que saldrá la nueva composición del Parlamento Europeo. Unos comicios que, en gran medida, van a condicionar la agenda europea y el futuro de la UE. Se elegirán 720 eurodiputados, son las primeras elecciones sin el Reino Unido por su salida de la Unión, por lo que se redistribuyen sus representantes y, en el caso de España, le corresponden dos más hasta un total de 61. La fragmentación de la Eurocámara se ha ido produciendo legislatura tras legislatura y, en esta ocasión, esa evolución, según las encuestas, seguirá produciéndose con una previsible subida de las opciones más conservadoras y de ultraderecha, defensoras de las posiciones más nacionalistas de los Estados miembros.

2024: LA UE VOTARÁ POR SU FUTURO

2024: LA UE VOTARÁ POR SU FUTURO

No cabe duda que el gran hito de 2024 en lo que se refiere al proyecto europeo lo constituirán las elecciones europeas que se celebrarán del 6 al 9 de junio próximos. De las urnas saldrá, no solo la nueva composición de la Eurocámara, sino los pactos de las familias políticas que harán posible los nombramientos clave en las instituciones de la UE. Tocará renovar caras, pero también en gran medida, prioridades de la agenda europea, baqueteada hoy por la incertidumbre y las crisis internacionales. Previamente, una presidencia semestral disminuida, la belga, pues, Bruselas entrará en periodo de campaña en mayo. Cuatro meses escasos en los que tratar de cerrar asuntos de urgencia como la renovación intermedia del Marco Financiero Plurianual 2021-2027, con una cita crítica, el Consejo Europeo extraordinario del 1 de febrero. Pero el 2024 viene marcado de nuevo por la guerra en Ucrania, que casi culmina ya su segundo año de conflicto y que sigue condicionando las decisiones de los 27.

2023: EL VIAJE A NINGUNA PARTE DE LA UE

2023: EL VIAJE A NINGUNA PARTE DE LA UE

Concluye el año 2023 y nos deja en la Unión Europea una sensación de haber hecho muchas cosas, pero sin un rumbo fijo, ni una idea clara del destino del viaje emprendido. Cierto es que, en estos 365 últimos días, se ha recuperado en parte la normalidad perdida tras los años de pandemia y del estallido de la guerra en Ucrania. Pero la realidad es que más allá de algunas leyes de gran relevancia, se nos va 2023 sin que sepamos qué papel podemos jugar en este incierto mundo, qué proyecto de principios y valores defendemos o siquiera, que mapa a futuro tendremos. En resumen, se ha hecho mucho en las Instituciones europeas, pero el resultado no está nada claro. Todo ello, con seis meses de presidencia española, lastrada por la situación interna de unas elecciones generales y un largo periodo de interinidad de nuestro Gobierno.