Sánchez se compromete en su investidura a que España estará entre los países que liderarán las reformas de las instituciones UE

El candidato a Presidente ha dejado su alusión a la Unión Europea para el final de su discurso como octava prioridad de su futuro Gobierno. Durante más de hora y media el candidato a Presidente, Pedro Sánchez, ha desgranado su plan de Gobierno para la legislatura, además de dedicar una buena parte de su intervención a defender la proposición de ley de amnistía que le ha dado la posibilidad de lograr la investidura. Sus referencias a la política europea las ha dejado para el final de su discurso.

"La octava prioridad de nuestro gobierno será Europa. En los últimos cuatro años, España ha cobrado un protagonismo internacional que nunca había tenido. Antes incluso de ostentar la presidencia rotatoria del Consejo, nuestro país ya lideraba en Bruselas debates clave, como el de la reforma del mercado eléctrico o la PAC, y ahora es un referente continental en temas como la autonomía estratégica, la transición verde y digital, o las políticas de migración y asilo", ha señalado Sánchez en su intervención en referencia al papel de su gobierno en la legislatura anterior en la UE.

Respecto al futuro que le espera al proyecto común de la UE, el candidato ha precisado que "en los próximos años, la Unión tendrá que tomar decisiones cruciales. Tendrá que tejer nuevos lazos con el resto del mundo, y en especial con los países de Latinoamérica, el Caribe y el Magreb. Tendrá que consolidar su liderazgo tecnológico y científico a nivel global. Tendrá que abordar desafíos como la migración y el cambio climático. Y tendrá que acometer una ampliación hacia los Balcanes Occidentales y hacia Ucrania, Moldavia y Georgia. Una ampliación que responde a un deber moral y un interés geopolítico para Europa, porque traerá más recursos, más resiliencia y más mercado a los Estados Miembros. Pero que también implicará desafíos nacionales y una revisión del funcionamiento de las instituciones comunitarias".

En este sentido, se ha comprometido a que "España no será un mero testigo de esos procesos. Estará entre los países que los lideren. Analizando los retos y las oportunidades. Proponiendo soluciones. Defendiendo los valores europeos. Impulsando el diálogo y el respeto a la pluralidad en el Continente, como lo hace dentro de sus fronteras".