El Consejo ha aprobado unas conclusiones que reafirman su apoyo inquebrantable a la búsqueda del pueblo bielorruso de una Bielorrusia libre, democrática, soberana e independiente como parte de una Europa pacífica y próspera. "Bielorrusia sigue ocupando un lugar destacado en la agenda de la UE. Denunciamos la continua violación sin sentido de los derechos humanos por parte del régimen de Lukashenka y el nivel de represión sin precedentes antes de las próximas elecciones. Los responsables tendrán que rendir cuentas. Nos solidarizamos con el pueblo bielorruso y seguimos decididos a movilizar todas las herramientas para apoyar su búsqueda de la paz y la democracia", ha señalado Josep Borrell, Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad de la UE. En sus conclusiones, el Consejo expresa su continua y profunda preocupación por el deterioro de la situación de los derechos humanos en Bielorrusia. Condena enérgicamente las continuas campañas de persecución e intimidación contra todos los segmentos de la sociedad bielorrusa, el nivel sin precedentes de represión y las restricciones a la participación política, que socavan el potencial de equidad y legitimidad de las elecciones parlamentarias y locales previstas para el 25 de febrero de 2024. El Consejo expresa su profunda preocupación por las acciones del régimen de Lukashenka que afectan a la identidad nacional de Bielorrusia y reafirma su compromiso de apoyar y promover la lengua y la cultura bielorrusas. Además, el Consejo condena enérgicamente el continuo apoyo prestado por el régimen bielorruso a la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania y pide a Bielorrusia que se abstenga de tales acciones y cumpla con sus obligaciones internacionales. También condena los ataques híbridos del régimen en las fronteras exteriores de la UE, incluida la instrumentalización de los inmigrantes. La UE ha impuesto sanciones selectivas contra el régimen de Lukashenka y está dispuesta a tomar más medidas restrictivas y selectivas mientras las autoridades bielorrusas continúen con sus acciones. Las conclusiones también subrayan el firme apoyo de la UE a la sociedad civil bielorrusa y acogen con satisfacción el establecimiento del Grupo Consultivo de la UE con las fuerzas democráticas y la sociedad civil bielorrusas. Además, recuerdan el compromiso de la UE de proporcionar 3.000 millones de euros a una futura Bielorrusia democrática a través de un plan integral de apoyo económico que tiene como objetivo desarrollar resiliencia y promover reformas democráticas, crear nuevos empleos y mejorar el nivel de vida de las personas. Una futura Bielorrusia democrática tiene un lugar en la familia europea.
