Los dos países han encargado a un grupo de expertos un texto para explorar las opciones posibles ante una ampliación de la UE. "La UE aún no está preparada para acoger a nuevos miembros" con esta premisa empieza el informe que han elaborado doce expertos y que ha sido encargado por Francia y Alemania sobre como avanzar ante una posible ampliación de la Unión Europea. La entrada de nuevos países ha cobrado fuerza tras el inicio de la guerra en Ucrania y se está tratando con mayor urgencia que en el pasado. En la cola para formar parte del bloque se encuentra Ucrania, pero también países de los Balcanes Occidentales. Una de las primeras recomendaciones del informe es que la UE refuerce el papel del Estado de Derecho. "El Estado de Derecho es un principio constitucional no negociable para el funcionamiento de la UE y una condición previa para ingresar en ella. En última instancia, la UE no puede funcionar sin reciprocidad, confianza mutua y sin la adhesión de todos sus miembros a sus principios", apunta el texto. También hace propuestas para aumentar la agilidad en la gestión de la UE. "El informe sugiere que no se aumente el número de eurodiputados más allá de los 751 actuales, y un nuevo sistema para asignar escaños, así como modificar el sistema de "tríos" para la presidencia de turno del Consejo de la UE en favor de "quintetos" y del Colegio de Comisarios a dos tercios de los Estados miembros o desarrollar un modelo jerárquico", asegura el documento. Además defiende el fin de la unanimidad, uno de los grandes quebraderos de cabeza del bloque. "La necesidad de reformar los procesos de toma de decisiones en el seno del Consejo antes de la próxima ampliación, todas las decisiones políticas restantes deberían transferirse de la unanimidad a la votación por mayoría cualificada". El informe también advierte sobre la posible falta de fondos si se culmina una ampliación hacia el este. "Para afrontar los retos de la reforma de las políticas de la UE y la distribución de la financiación en el contexto de la ampliación y dotar a la UE de los medios financieros necesarios para reaccionar con rapidez ante las crisis emergentes, el informe recomienda aumentar el presupuesto de la UE en tamaño y relación con el PIB y hacerlo más flexible", defiende el texto.
