Se ha celebrado en Mons la reunión informal de los ministros de Política de cohesión de la UE en la que acordaron directrices ambiciosas y coherentes para el futuro de la política de cohesión en Europa después de 2027. La reunión informal de ministros responsables de la política de cohesión estuvo presidida por el ministro presidente de Valonia, Elio Di Rupo. La reunión reunió a los 27 representantes de los Estados miembros de la UE, Elisa Ferreira, Comisaria de Cohesión y Reformas, Nicolas Schmit, Comisario de Empleo y Derechos Sociales, y representantes de otras instituciones europeas (Comité Económico y Social Europeo, Comité Europeo de las Regiones y Banco Europeo de Inversiones). En la reunión también participó Enrico Letta, a quien el Consejo Europeo encargó la redacción de un informe sobre el futuro del mercado interior, subrayando que la política de cohesión y el mercado interior están indisolublemente ligados. Las partes interesadas intercambiaron puntos de vista sobre el futuro de la política de cohesión en Europa como principal política de inversión a largo plazo. En una época de desigualdad creciente y tensiones sociales agudizadas, la política de cohesión –como una auténtica política de inversión y solidaridad a nivel europeo– es más necesaria que nunca. De hecho, gracias a su enfoque regional y estructural, la política de cohesión es un poderoso vector e impulsor de la transición dentro de la Unión Europea. Sin embargo, esto no significa que la política de cohesión deba permanecer como está hoy. Los distintos Estados miembros han reafirmado la necesidad de adaptar la política de cohesión para que tenga en cuenta las realidades específicas de cada región de la Unión Europea. Las sucesivas reformas de la política de cohesión y la movilización de fondos de cohesión para responder a sucesivas crisis han significado que la política de cohesión se haya ido alejando gradualmente de sus objetivos fundacionales y su razón de ser. Teniendo esto en cuenta, los ministros reflexionaron sobre las principales prioridades estratégicas de la política de cohesión, garantizando que no estén desconectadas de las necesidades específicas de las empresas y los ciudadanos europeos y teniendo en cuenta las realidades específicas de las diferentes regiones. Además de las prioridades estratégicas, los ministros también discutieron los principios clave que deben guiar la política de cohesión posterior a 2027 y respaldar su papel como palanca para transiciones equitativas, ancladas en la realidad de las diferentes regiones. Finalmente, los ministros discutieron medidas de simplificación adicionales que deben introducirse para ampliar las inversiones cofinanciadas por la Unión Europea, los Estados miembros o las regiones, sobre el terreno. La presidencia belga tiene intención de aprovechar las conclusiones de esta reunión, así como las reflexiones desarrolladas paralelamente por la Comisión Europea, para elaborar directrices para la política de cohesión posterior a 2027. Los ministros europeos responsables de la política de cohesión se reunirán de nuevo en Luxemburgo el 18 de junio para adoptar las conclusiones del noveno informe sobre la cohesión. "Esta reunión reafirmó el papel esencial de la política de cohesión. ¡Durante décadas, esta política ha permitido reducir las disparidades de desarrollo entre las regiones europeas! Para Bélgica, debe seguir siendo la principal política europea de inversiones estructurales. Es una política de solidaridad en la que no -¡uno se queda atrás, y es la mejor respuesta a las necesidades de los ciudadanos y las empresas de Europa! Como dijo una vez Jacques Delors, el padre de la política de cohesión: "Para que la Unión Europea funcione, la competencia que estimule, la solidaridad que una y la cooperación es necesario fortalecer", reiteró el ministro presidente valón, Elio Di Rupo.
