Backstage: los socialistas europeos intentan ganar impulso en Roma

La capital italiana acoge los días 1 y 2 de marzo el Congreso del Partido de los Socialistas Europeos (PES), que marcará el inicio de la carrera electoral al Parlamento Europeo el próximo 6 de junio. El Congreso, arranca el sábado, 2 de marzo, a partir de las 9:30 horas con las intervenciones del secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el presidente del PES, el sueco Stefan Löfveny, y la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen. Jefes de gobiernos progresistas, líderes socialdemócratas, activistas y simpatizantes de toda Europa se reunirán en Roma para elegir al candidato común, el luxemburgués Nicolás Schmit, actual comisario de Trabajo y Asuntos Sociales, y adoptar el Manifiesto del PES, que establece las prioridades y los proyectos con los que concurren a las elecciones de 2024 a la Eurocámara. En el Congreso participará una representación del PSOE (miembros de la CEF, ministros, diputados, senadores y europarlamentarios).

El viernes, 1 de marzo, las Juventudes Socialistas Europeas lanzarán su campaña, y a partir de las 19:30 horas será cuando los líderes celebren un primer encuentro, en el que tendrá lugar una foto de familia.

El sábado, 2 de marzo, tras la inauguración, intervendrá la presidenta del Grupo de Socialistas y Demócratas en el Parlamento Europeo, Iratxe García. Tras la participación de otros líderes sobre cómo construir sociedades más justas y democráticas, se adoptará el Manifiesto común con el que los progresistas europeos concurren a la próxima cita electoral y se elegirá al candidato, Nicolas Schmit. Clausurarán el Congreso el ex primer ministro de Portugal, Antonio Costa; el canciller alemán, Olaf Scholz, y la líder del Partido Democrático italiano, Elly Schlein.

Los socialistas van claramente por detrás en las encuestas de cara a los comicios europeos de junio, incluso hay sondeos que pronostican un sorpaso por parte de la extrema derecha de los Reformistas y Conservadores a los liberales, quedándose cerca de los propios socialdemócratas. Ninguno de los gobiernos socialistas de los grandes países atraviesan un buen momento político, ya que el canciller alemán Olaf Scholz y su Ejecutivo semáforo pasa por horas muy bajas; en Portugal, Antonio Costa tuvo que dimitir por un escándalo de corrupción y en España, la nueva legislatura que preside Pedro Sánchez padece una fuerte inestabilidad política.