Uno ha de preguntarse qué es el mar. ¿El espectáculo? ¿La inmensidad? ¿El horizonte? ¿El color? ¿La posibilidad? ¿El trabajo? ¿El almuerzo? ¿La huida? ¿La vida? ¿La tumba? ¿El estruendo? ¿La calma? ¿La historia? ¿El agua? ¿La sal? ¿El color? ¿La llegada? ¿El infinito? ¿El soporte? ¿El engaño? ¿El miedo? ¿Lo desconocido? ¿El nexo? ¿La cultura? ¿La distancia? ¿El germen? ¿El fin? ¿Lo femenino? ¿Un escultor? ¿Las peguntas? ¿Las repuestas? ¿Lo desconocido? ¿Lo llano? ¿Lo pacífico? ¿El ocio? ¿Un dios? ¿Lo húmedo? ¿Lo profundo? ¿La energía? ¿Lo indefinible? ¿El escenario? ¿Un jardín? ¿La inspiración? ¿La frontera? ¿La memoria? ¿Una metáfora? ¿El ritmo? ¿El paisaje? ¿Lo cambiante? ¿El misterio? ¿El destino? ¿Un estercolero? ¿Un tema? ¿Confín?¿Provocación? ¿Aventura? ¿Madre? ¿Verdugo? ¿Marco? ¿Arte? ¿Todo lo opuesto?