Bruselas veta todo contacto con entidades vinculadas a Huawei tras el escándalo de corrupción

La Comisión Europea ha reafirmado este jueves su decisión de no mantener ningún tipo de contacto con representantes directos o indirectos de la empresa tecnológica china Huawei, tras el escándalo de presunta corrupción que sacude al Parlamento Europeo y que involucra a lobistas de la compañía.

El portavoz del Ejecutivo comunitario para temas de seguridad económica y comercio, Olof Gill, confirmó durante la rueda de prensa diaria que la Comisión ha vetado a Huawei de cualquier tipo de reunión o contacto institucional. “Huawei ya no puede acceder a los funcionarios de la Comisión ni entrar a nuestros edificios”, declaró Gill.

La medida se aplica no solo a representantes directos de la empresa, sino también a consultoras, asociaciones comerciales o cualquier entidad que actúe en su nombre o defienda sus intereses. No obstante, Gill matizó que la Comisión evaluará caso por caso el contenido de las reuniones con organizaciones amplias, como asociaciones sectoriales o entidades de estandarización, donde Huawei pueda figurar como miembro, con el fin de evitar interferencias.

https://aquieuropa.com/la-fiscalia-belga-investiga-a-huawei-por-supuesta-corrupcion-en-el-parlamento-europeo/ “Tenemos funcionarios capaces de detectar cuándo un punto en la agenda de una organización está vinculado con los intereses de Huawei. Si eso sucede, simplemente cancelamos la reunión”, añadió el portavoz, insistiendo en que el objetivo es “proteger el espacio institucional” sin impedir el trabajo legítimo de organismos que agrupan a múltiples actores.

La decisión de Bruselas se produce en un contexto marcado por la investigación judicial que desarrolla la fiscalía federal belga, en la que se sospecha que lobistas de Huawei pagaron sobornos a una quincena de eurodiputados para influir en decisiones legislativas.

Los delitos bajo investigación incluyen corrupción, blanqueo de dinero, falsificación de documentos y pertenencia a organización criminal. La policía ha realizado más de veinte registros en domicilios de Bruselas desde el pasado marzo.