El Consejo de Competitividad aprueba conclusiones para fortalecer la I+D+i, superar la fragmentación investigadora y potenciar el sector espacial

El Consejo de Competitividad centrado en Investigación y Espacio aprobó este viernes en Bruselas conclusiones que buscan fortalecer la competitividad de la región, impulsando la investigación y la innovación (I+D+i) como pilares fundamentales para alcanzar la neutralidad climática en 2050 y reforzar la autonomía estratégica de la UE. Los ministros abogaron por un enfoque integral para superar la fragmentación del Espacio Europeo de Investigación, incrementar las inversiones en I+D, y potenciar las capacidades del sector espacial, con especial atención a la sostenibilidad y la cooperación internacional. Los ministros responsables de investigación de la Unión Europea aprobaron este viernes un conjunto de conclusiones para reforzar la competitividad del bloque. Estas conclusiones hacen hincapié en el papel crucial de la investigación y la innovación (I+D+i) en la promoción de la sostenibilidad económica, social y medioambiental, y en la consecución de los ambiciosos objetivos de la UE, como la neutralidad climática para 2050. Los ministros subrayaron que la I+D+i debe estar en el centro de las políticas y estrategias tanto de la UE como de los Estados miembros. Se hizo especial énfasis en la necesidad de fomentar tanto la investigación básica como la aplicada, así como la innovación disruptiva y la excelencia científica, áreas esenciales para superar la brecha de innovación dentro de la UE y aumentar la competitividad frente a otras potencias globales. Una de las propuestas respaldadas fue la de alcanzar el objetivo del 3% del PIB europeo en inversión en I+D para 2030, lo que implica aumentar tanto la financiación pública como privada. En este contexto, se hizo un llamado a una movilización eficiente de los recursos, incentivando una cultura de inversión en innovación. Además, se destacó la importancia de mejorar las infraestructuras de investigación y tecnología como activos estratégicos para la competitividad de Europa, promoviendo la ciencia abierta y la cooperación transnacional. Otra conclusión fue la necesidad de superar la fragmentación del Espacio Europeo de Investigación, fomentando la creación de ecosistemas de innovación interconectados a nivel regional, nacional y europeo. También se subrayó la importancia de crear un marco empresarial flexible que favorezca el desarrollo de tecnologías disruptivas, permitiendo a las empresas emergentes acceder a inversiones y aprovechar las oportunidades del mercado único europeo. Además de los esfuerzos generales por impulsar la I+D+i, el Consejo aprobó una serie de conclusiones centradas en la investigación en el ámbito de la bioeconomía, especialmente en Europa Central y Oriental. La iniciativa tiene como objetivo gestionar de manera sostenible los recursos naturales, mejorar la seguridad de los sistemas alimentarios y promover una bioeconomía circular. La cooperación en investigación entre los Estados miembros, así como con los países de los Balcanes Occidentales y los países candidatos a la UE, será crucial para alcanzar estos objetivos, que están alineados con el Pacto Verde Europeo. En cuanto al desarrollo de materiales avanzados, los ministros destacaron la creciente demanda de estos materiales en Europa, especialmente en relación con la sostenibilidad y la economía circular. Las conclusiones subrayan la necesidad de acelerar la investigación en este sector para crear un ecosistema de materiales que sea seguro, eficiente y respetuoso con el medio ambiente. Además, se acordó crear una infraestructura digital para estos materiales y mejorar la colaboración entre los fondos de la UE, innovadores y pymes. Por otro lado, se abordaron las cuestiones relativas al sector espacial, reconociendo su importancia estratégica para la competitividad, la autonomía y la seguridad de la UE. En este sentido, los ministros aprobaron conclusiones sobre el fortalecimiento de las competencias europeas en ciencia, investigación e innovación espacial. Se subrayó la necesidad de fomentar carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) y promover una mayor cooperación internacional. También se discutió el fortalecimiento de la autonomía espacial de la UE, tanto en términos de infraestructura como de defensa, abordando las amenazas crecientes a la seguridad. Además, los ministros aprobaron las conclusiones sobre la evaluación intermedia del Programa Espacial de la UE, evaluando los avances desde su puesta en marcha en 2021. El Consejo resaltó la necesidad de enfrentar la creciente inseguridad en el espacio, reducir la dependencia tecnológica de actores externos y reforzar la autonomía espacial de la Unión. Finalmente, los ministros discutieron la futura política espacial de la UE, con énfasis en las sinergias entre defensa y programas civiles, y en la importancia de las tecnologías de doble uso. Se subrayó que la futura Ley Espacial de la UE debe abordar estas cuestiones para garantizar la seguridad y autonomía estratégica del bloque europeo en el espacio.

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