Tras reunirse con Zelenski y Putin, el primer ministro húngaro se entrevistó este lunes con el presidente Xi Jinping, afirmando que "China es una potencia clave en la creación de condiciones para la paz en la guerra de Ucrania". El primer ministro húngaro, cuyo gobierno asumió la Presidencia rotatoria del Consejo de la UE el pasado 1 de julio, anunció que Hungría "considerará los próximos seis meses como una misión de paz para mediar entre Rusia y Ucrania". Orbán destacó que, aunque las partes enfrentadas tienen la última palabra en la guerra, tres potencias mundiales: China, Estados Unidos y la Unión Europea, tienen una influencia decisiva sobre cuándo terminará el conflicto. Orbán ha explicado que, tras reunirse con los líderes de Ucrania y Rusia, su tercera parada ha sido Pekín, subrayando que "China es la única potencia mundial que se ha comprometido claramente con la paz desde el principio". El presidente Xi Jinping ha reiterado hoy su compromiso con los esfuerzos para crear la paz. El primer ministro húngaro visitó el pasado viernes Moscú para reunirse con Putin, tras haber visitado Kiev y dialogado con su homólogo ucraniano sobre la posibilidad de un alto el fuego temporal para acelerar las negociaciones de paz. Este viaje no fue bien recibido por los líderes de la UE, quienes subrayaron la falta de autorización de Hungría para negociar en representación del bloque. Orbán defendió su misión de paz argumentando que "no se puede lograr la paz desde un cómodo sillón en Bruselas" y, a pesar de que la Presidencia rotatoria de la UE "no tiene mandato para negociar en nombre de la UE, no podemos quedarnos sentados esperando a que la guerra termine milagrosamente". Próxima parada: Washington Este mismo lunes, Orbán anunció que visitará Washington DC como parte de su actual misión de paz. Washington acogerá entre los días 9 y 11 de julio la cumbre anual de la OTAN, donde se prevé que la alianza aborde la posibilidad de proporcionar más apoyo a Ucrania.
