Los ministros de Defensa de la OTAN acordaron este viernes un plan que establece que la organización liderará la coordinación de la asistencia y el entrenamiento en materia de seguridad en Kiev. Según explicó el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, el plan incluirá un comando de la OTAN, ubicado en una instalación estadounidense en Wiesbaden, junto con nodos logísticos en la parte oriental de la Alianza. Este esfuerzo estará bajo el mando de un General de 3 Estrellas que reportará al Comandante Supremo Aliado en Europa (SACEUR) e involucrará a casi 700 personas de la OTAN y países socios. Este anuncio llegó durante el segundo día de reuniones de Ministros de Defensa de la OTAN, celebradas en la capital comunitaria, como preparación para la Cumbre que tendrá lugar en Washington en julio. Durante el encuentro de dos días, se discutió el apoyo a Ucrania y las estrategias de disuasión y defensa de la Alianza. La OTAN se encargará de supervisar el entrenamiento de las fuerzas armadas ucranianas en instalaciones de entrenamiento en países aliados. Stoltenberg destacó que la Alianza apoyará a Kiev mediante la planificación y coordinación de donaciones, la transferencia y reparación de equipos, y el desarrollo a largo plazo de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Subrayó que "estos esfuerzos no convierten a la OTAN en parte del conflicto, pero aumentarán nuestro apoyo a Ucrania para defender su derecho a la autodefensa". Añadió que la Alianza "responderá a las provocaciones rusas de manera tranquila y mesurada". En el mismo encuentro, los ministros acordaron un conjunto de opciones de respuesta para los aliados, tanto a nivel individual como colectivo. Estas opciones incluyen un mayor intercambio de inteligencia, una mayor protección de la infraestructura crítica, incluida la submarina y el ciberespacio, y mayores restricciones a los agentes de inteligencia rusos. Stoltenberg insistió en que las crecientes amenazas que enfrenta la OTAN, exigen requisitos de capacidad “significativamente mayores” por parte de los Aliados, en ámbitos como armas y municiones, defensa aérea y antimisiles, logística y armas de largo alcance. En ese sentido, destacó que durante los próximos cinco años, los aliados de la OTAN en Europa y Canadá planean adquirir miles de sistemas de artillería y defensa aérea, 850 aviones modernos, en su mayoría F-35 de quinta generación, además de capacidades de alta gama.
