360 grados. Fortalecer la PAC antes de la ampliación de la UE

La Comisión Europea ha expuesto esta semana en una comunicación sus propuestas de reformas de la UE previas a la ampliación del club de los 27, de las que destaca la necesidad de fortalecer la capacidad de la Política Agraria Común para una UE de más de 30 países. El documento adoptado por la Comisión destaca la necesidad de apoyar un modelo de producción agroalimentaria sostenible y competitivo, teniendo en cuenta al mismo tiempo las necesidades de los agricultores y la variedad de modelos agrícolas.

Argumenta la comisión que las revisiones de políticas de la PAC deben contemplar un examen sobre la capacidad de los países candidatos y de los candidatos potenciales para aplicar la legislación de la UE sobre planes de apoyo directo a la agricultura y para implementar organizaciones comunes de mercado para diversos productos agrícolas.

Esta propuesta de fortalecer la PAC se produce pocas semanas después de las protestas de los agricultores europeos, que reclaman, entre otras cosas, menos presión en las normativas que regulan la actividad y se oponen a la liberación de las importaciones.

Otros propósitos de la Comisión recogidos en ese documento de propuestas de reformas de la UE es la revisión de políticas de resiliencia a través de innovaciones industriales “revolucionarias”, para aumentar la conectividad física de una UE ampliada, lo que traerá beneficios tangibles a los consumidores y las empresas.

Y no olvida la Comisión en sus propuestas de reforma los compromisos climáticos y medioambientales. Así, el documento subraya que una Unión más grande tiene el potencial de contribuir positivamente a abordar el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Los países de la ampliación también tienen un enorme potencial en términos de energías renovables y eficiencia energética.

En este sentido, argumenta que las revisiones de políticas tendrían que examinar qué nuevos desafíos pueden abordarse mediante la política climática e industrial verde de la UE, salvaguardando al mismo tiempo las ambiciones europeas y garantizando la previsibilidad.

Por otro lado, la Comisión indica que ampliar la UE aporta beneficios tangibles a la economía, como menores costos de transacción, mayor inversión, comercio intrarregional, crecimiento económico y derechos sociales más sólidos. También brinda acceso a mercados financieros más grandes y diversificados, reduciendo así los costos de financiamiento y brindando a los consumidores más opciones y precios más bajos.

Sin embargo, la Comisión puntualiza que abordar los desafíos relacionados con la gobernanza de las políticas de convergencia económica, social y territorial dentro de un grupo más amplio de Estados miembros, las revisiones de políticas deberían reflexionar sobre cómo cerrar las brechas legislativas y de aplicación, entre otras cosas.

Y otro punto fuerte de propuesta de reformas de la UE previa a la ampliación es el controvertido tema de seguridad, migración y gestión de fronteras. En este punto, la Comisión explica que en un contexto geopolítico cada vez más desafiante, una Unión más grande aumentaría su papel en los asuntos mundiales y en entornos multilaterales, si es capaz de actuar de manera unida, rápida y decisiva.

Así, la Comisión considera que esta unidad y agilidad externas requieren una visión compartida subyacente y un alto grado de análisis y opiniones compartidos entre los Estados miembros.

Sin embargo, matiza, una Unión más grande podría, al menos inicialmente, traer una mayor diversidad de intereses y agendas de política exterior. Por ello, las revisiones de políticas deberían examinar la credibilidad y la capacidad de acción de la Unión, lo que dependerá de una toma de decisiones eficiente.